Veintitrés días después de levantada la Huelga de Hambre en la Universidad Surcolombiana y con importantes logros obtenidos en materia presupuestal, desde la Revista Lanzas y Letras ofrecemos un especial con el testimonio de 4 participantes de este mecanismo de presión. Aprendizajes, lazos afectivos, compañerismo y solidaridad radical son, sin duda, los mayores logros de este proceso de articulación y unidad que, como lo reza nuestro himno, nos llevará a romper las cadenas de la esclavitud.
Han pasado 23 días desde que se levantó la Huelga de Hambre de nuestros compañeros en la Universidad Surcolombiana, proceso que muchos acompañamos desde sus inicios de forma presencial y directa y algunos, por la coyuntura actual, desde la distancia ocupando un espacio que, en la teoría de los Nuevos-Nuevos movimientos sociales, cobra una gran importancia: el espacio virtual como un mecanismo de presión.
A lo largo y ancho del territorio nacional, los estallidos por la matrícula cero se venían acicalando en las universidades públicas, la Universidad Surcolombiana, casa de Uberney Quimbayo, quien germinó y dejó semilla para alimentar las futuras resistencias; en donde esta revista no es la excepción.
La USCO decide dar un paso más largo en comparación con lo que muchas otras universidades se habían planteado, pues no bastando con proponerse lograr el financiamiento de la matrícula para los periodos 2020-2 y 2021-1, deciden pensarse la construcción de un fondo de auxilio a las matrículas mediante una ordenanza departamental que trascienda las pieles que ocupan cada cuatro años los cargos públicos.
Dejando de lado la vida personal para y por el bienestar común de más de doce mil familias de la región del Surcolombiana, la compañera Katherin Diaz y los compañeros Humberto Perdomo, Juan Diego Castro, Juan Diego Areiza y Napoleón Gómez deciden demostrar la fuerza y la dignidad que existe al poner en tensión su integridad física y mental con el objetivo de lograr la gratuidad de la educación (al menos para los próximos dos semestres, como primer paso) al ver que, luego de largos diálogos, la voluntad política expresada por los diferentes entes territoriales resultaron infértiles.
En este Especial de Lanzas y Letras queremos presentar las diferentes palabras escritas por la y los huelguistas desde el entramado de sentimientos, pensamientos y vivencias que se presentaron en el transcurrir de esas 264 horas de Huelga de Hambre. Estos son en realidad relatos simples, pero cargados de una profundidad inmensa donde se contempla que lo realizado está atravesado por una idea de dignidad y entrega al otro, guiados siempre por un sentido profundo de amor y solidaridad radical. Con estas palabras, se nos concede percibir aquello que está detrás de la huelga, lo no contado en los medios o comunicados. Aquí encontrarán un sentido y un pensamiento, cargados de rebeldía, solidaridad, tejido colectivo, organización, resistencia, compromiso y unidad, pasando por la preocupación cruda de las madres de cada uno al ver que la palabra tenue no alcanzaba a convencer a la hija o al hijo de poner en vilo su vida. Todo esto nos permite, a quienes les leemos en una Colombia donde se escucha más la guerra que la paz, tener una ola de esperanza y fuerza, y una convicción de lucha para la transformación de la realidad.
“Hombre despierta que es hora de la luz
Todo a tu lado respira esclavitud
Suelta de ti las cadenas, suéltalas
Y ata con ellas al amo mal común…”
– Himno Universidad Surcolombiana.
Artículos en este especial (dale clic al título):
- “Hasta la matrícula cero, ya no hay vuelta atrás”: Luis Humberto Perdomo.
- “No sabes el tamaño del reto hasta que lo asumes: ¡Once días!“: Katherin Daniela Díaz.
- “Juntxs haremos la historia, vámonos”: Juan Diego Castro.
- “Una mañana en el horizonte”: Jorge Napoleón Gómez.